Archivo por meses: mayo 2015

Crónica de una nausea anunciada.

Seguramente cuando salga la próxima corporación municipal (da igual el color), encargará y pagará a un equipo de técnicos preparadísimos para que realicen un estudio exhaustivo sobre las necesidades de la ciudad, que contrastará con la Fundación de una gran entidad financiera, que tras un calendario de reuniones -paritarias- dictaminará que hay que convocar un concurso público de ideas para incentivar el reciclaje. Se convocará en rueda de prensa y con campaña de cuñas en radio («tu opinión cuenta») y continuará con la formación de los ganadores del concurso de ideas en un vivero de empresas para que hagan un estudio de viabilidad -es un decir- y así poder convertir en realidad el proyecto y poder solicitar, presentar, corregir, subsanar y justificar una mini subvención de 1034,50 Euros concedida en 240 días, que facilitará lo que realmente se pretende: un endeudamiento de por vida del incauto ideador o idealista, con un banco rescatado a través de un crédito ICO (que Avalia no avalará) y que se abordará desde la precariedad y fragilidad total que produce ser autónomo (ahora conocidos por «emprendedores»). Eso o la nada.

manos

Una vez en marcha la empresa, con la subvención se pagarán los impuestos y las cuotas de autónomos (llega para dos meses), pero para regocijo de la comunidad emprendedora reciclante, se realizará un congreso nacional denominado “Laboratorio Urbano Abierto al reciclaje” (en inglés)  que será un éxito -siempre-, y saldrá reflejado en la “III Memoria de Creación de Riqueza cristalina” u otro documento semejante de gran utilidad para su socialización. El informe dictaminará que: reciclar es bastante bueno, que reciclan más los que tienen un contenedor cerca que los que no lo tienen, y que se van a tomar las medidas oportunas (si hay partida presupuestaria).

Así, la corporación municipal correspondiente, podrá al final de la legislatura que viene, comunicar su éxito con entusiasmo a través de los medios semi-arruinados afines (todos), comentarlo en varias tertulias de radio local y sobre todo llenar la ciudad con 400 marquesinas y 200 autobuses que portarán carteles de una gran placidez visual con el mensaje siguiente:  “Mira maj@: lo estamos haciendo de puturrú, y si no lo ves claro, será que no pagas suficientes impuestos”.